190. Anhelar lo posible
Cuando deseáis lo posible, lo imposible
también puede suceder Cuando deseáis lo imposible, hasta lo posible se vuelve
difícil.
Hay dos tipos de personas, las
de energía baja y las de energía alta. No hay nada bueno en tener energía alta
ni nada malo en tenerla baja. Así es como existen dos tipos. Las personas de
baja energía se mueven muy despacio. Su crecimiento no es sobresaltado, no dan
saltos. No explotan. Simplemente crecen como lo hacen los árboles. Requieren
más tiempo, pero su crecimiento está más asentado, es más seguro, y retroceder
es muy difícil. En cuanto han alcanzado un punto, no es fácil que lo pierdan.
Las personas de alta energía
se mueven deprisa. Dan saltos. Con ellos, el trabajo es muy rápido. Eso está
bien, pero hay un problema: sea lo que fuere lo que consigan, pueden perderlo
con igual facilidad. Retroceden con suma facilidad porque han sido saltos, no
desarrollo. Este necesita madurar lentamente, necesita tiempo.
Las personas de baja energía
saldrán derrotadas en una competición mundana. Siempre se rezagarán. Por eso
han sido criticadas. Hay tanta competencia en el mundo. Se apartarán de la
carrera de ratas que es nuestra sociedad; no serán capaces de permanecer en
ella. Serán expulsadas, las echarán.
Pero en lo referente al
crecimiento espiritual, pueden crecer con una mayor profundidad que las
personas de alta energía, porque son capaces de esperar y ser pacientes. No
tienen demasiada prisa. No quieren nada al instante. Sus expectativas jamás van
dirigidas hacia lo imposible. Solo anhelan lo posible.
Osho - DÍA A DÍA,
365 meditaciones para el aquí y el ahora.