228. Muerte y meditación
En cuanto sabéis que vais a morir en unos días, inmediatamente este mundo -el dinero, el banco, los negocios, esto y aquello-se
convierte en algo inútil. No deja de ser más que un sueño, y vosotros
empezáis a despertar
En cuanto le decís a un hombre que va a morir en un periodo de tiempo específico, y es seguro
-el hombre ya está muerto en cierto sentido
y empieza a pensar en el futuro-, entonces
la meditación es posible. En cuanto una persona
sabe que va a morir, se desprenderá de muchas tonterías
por propia voluntad. De inmediato la totalidad de su visión se transforma.
Si tenéis que marcharon
mañana, empezáis
a hacer las maletas
y ya no os preocupa la habitación que ocupáis en este hotel. De hecho, ya no estáis aquí; preparáis vuestras maletas y cosas y pensáis
en el viaje. Lo mismo sucede con una persona cuando le decís que va a morir, que la muerte es segura y no se puede evitar y que no debería seguir tonteando; ha llegado el momento
decisivo y sabe que ha desperdiciado demasiado de su vida...
De inmediato el hombre
le da la espalda al mundo y empieza a
escudriñar en la oscuridad del futuro.
En ese momento,
si le habláis sobre la meditación, estará dispuesto a practicarla... y ese puede
ser el mayor de los regalos.
Osho - DÍA A DÍA,
365 meditaciones para el aquí y el ahora.