88. Trabajad con equilibrio
El mejor arreglo es trabajar en el mundo
pero sin perderse en él. Trabajad durante cinco o seis horas y, luego olvidaos
de todo. Dad al menos dos horas a vuestro desarrollo interior; unas pocas horas
a vuestra relación, al amor, a los niños, a los amigos, a la sociedad.
Vuestra profesión solo debería
ser una parte de la vida. No debería solaparse en todas las dimensiones de
vuestra vida, como sucede por regla general. Un médico se convierte en un
médico durante casi las veinticuatro horas. Piensa en ello, habla de ello.
Incluso cuando come es un médico. Mientras hace el amor con su mujer, es
médico. Entonces es una locura; es enfermizo.
Para evitar esto, la gente
escapa. Entonces se convierte en buscadora las veinticuatro horas del día. Una
vez más, comete el mismo error de ser algo las veinticuatro horas al día.
Todo mi esfuerzo radica en ayudaros
a estar en el mundo y, sin embargo, a ser buscadores. Desde luego es más
difícil, porque habrá más desafío y situaciones. Es más fácil ser un médico o
un buscador. Será complicado ser ambas cosas, porque eso os proporcionará
muchas situaciones contradictorias. Pero una persona crece cuando tiene ante sí
situaciones contradictorias. En la agitación, en ese choque de contradicciones,
nace la integridad.
Mi sugerencia es que trabajéis
de seis a ocho horas y que las dieciséis horas restantes no seáis médicos.
Emplead dichas horas para otras cosas: para dormir, para la música, la poesía,
la meditación, el amor o para holgazanear.
También eso es necesario. Si
una persona se vuelve demasiado sabia y no puede holgazanear, se torna pesada,
sombría, seria. Se pierde la vida.
Osho