Pureza



147. Pureza       
La pureza que reside en el corazón es incorruptible; lo que hacéis no la afecta en absoluto.
Hasta el mayor pecador permanece puro en el núcleo más profundo de su ser. De modo que incluso el pecador más profundo sigue siendo un santo; el pecado solo puede tocar la periferia, la circunferencia. No puede ir hasta vuestro núcleo porque el acto está en la superficie, el ser está en el núcleo.
Y cuando empezáis a mirar el ser de las personas, entonces nadie es un pecador, nadie lo ha sido jamás. Eso es imposible. La pureza es tan absoluta que todo lo que hacemos no es más que sueños; ese es el enfoque oriental. Este no le presta mucha atención a lo que hacéis. Dice que sin importar lo que hayáis hecho, simplemente podéis ir al interior y tener un contacto con el ser, que siempre es cristalino y siempre puro, y esa fuente permanece impoluta. En la periferia solo están las caras: santo y pecador, bueno y malo, el famoso y el notorio. Solo son actos, como si se representara un drama. Alguien se ha convertido en un Jesucristo y alguien en un Judas. Los dos son necesarios: Jesús no puede ser sin Judas, ¿y qué sería Judas sin Jesús? Ambos son necesarios para que acontezca toda la historia de Cristo. Pero detrás del escenario se sientan juntos para beber té y fumar.
Esa es la realidad. Todo este mundo es un vasto escenario, un gran drama representado.
Así que no os preocupéis demasiado al respecto. Sea cual fuere el papel que os haya correspondido, desarrolladlo con el máximo gozo posible, y recordad siempre que en lo más hondo permanecéis puros.
Osho

Mayo 27



Todas las almas necesitan retirarse del mundo ocasionalmente para dar con esa paz que está más allá de toda comprensión. Todas las almas necesitan estabilizarse, y eso tan solo puede ocurrir en paz y quietud. Una vez se ha establecido esa estabilidad interna, puedes dirigirte a cualquier parte y hacer lo que sea sin que el caos y la confusión externos te afecten para nada. Lo que te permite continuar cuando crees que has llegado al extremo de tu cuerda y no puedes dar un paso más es dirigirte al lugar secreto de lo Más Alto, encontrar tu unidad conmigo. Son esos pasos que se dan en lo desconocido, con fe, con Mi fuerza, los que obran maravillas y cambian la vida. Son esos pasos los que permiten que lo imposible se haga posible y los que hacen que venga Mi reino a la tierra, ese glorioso nuevo cielo y nueva tierra. Dirígete siempre hacia ese fin. Cambia y hazlo con rapidez cuando se requiera el cambio. YO ESTOY contigo siempre. Acude a Mí.

Eileen Caddy (la Voz Interior)

13 dic - Sta Filomena