Manicomio 29.12


363.   Manicomio             29.12
Recordad siempre una cosa: que como os encontráis ahora, como se encuentra todo el mundo... ya estáis locos. La humanidad está loca, esta Tierra es un manicomio. De modo que solo os podéis volver cuerdos, no locos; eso no es un problema.
Otra cosa es que tengáis miedo de volveros cuerdos, pero no temáis volveros locos, porque, ¿qué más podría suceder? ¡Lo peor ya ha pasado! Vivimos en la peor clase de infierno. De manera que si caéis, quizá lo hagáis en el cielo. No podéis caer en otro sitio porque este es el último. Pero la gente tiene miedo, porque cree que es lo normal aquello en lo que ha estado viviendo. Nadie es normal. Muy rara vez hay un hombre normal como Jesucristo o Buda: todos los demás son anormales. Pero lo anormal es la mayoría, de modo que se llaman normales; Jesucristo parece anormal. Y, desde luego, la mayoría puede decidir, en última instancia posee los votos para decidir quién es normal y quién no. Es un mundo extraño: aquí las personas normales aparecen como anormales y las anormales son consideradas normales.
¡Mirad a la gente! Observadla, observad vuestra propia mente: es un mono, un mono loco.
Durante treinta minutos escribid en un trozo de papel lo primero que se os ocurra y luego mostrádselo a todo el mundo. ¡Cualquiera certificaría que estáis locos! Si esta es vuestra escritura, estáis locos; pero se trata de vuestra mente.
No tengáis miedo. Seguid aquello que sintáis, aquello que viene a vosotros, seguid esa llamada, seguid esa pista. Y si desaparecéis, ¡desapareced! ¿Qué tenéis que perder?
Osho  - DÍA A DÍA,  365 meditaciones para el aquí y el ahora.

Diciembre 29


Abrid vuestro corazón y aceptad todos Mis dones buenos y perfectos. Están ahí esperándoos, pero muchas almas no abren su corazón y alargan sus manos para aceptar la herencia que les corresponde. O bien están asustadas o creen que son indignas de ella, o sencillamente no creen que exista tal herencia y, por tanto, rechazan lo que tan sólo está esperando ser reclamado. Si tienes dinero en el banco pero te niegas a aceptar que está ahí y rehúsas sacarlo de la cuenta debido a tu descreencia, tu eres la única en sufrir esa carencia y te las has de arreglar sin el dinero. Mis almacenes están llenos a rebosar, y todo lo que Yo tengo es tuyo; pero tienes que reclamar lo que es tuyo. No puedes llevar esta vida espiritual si no crees que esa herencia es tuya y la reclamas. El nuevo cielo y la nueva tierra están aquí ahora.
La Voz Interior  Eileen Caddy

13 dic - Sta Filomena