La vida es sencilla

34. La vida es sencilla

La vida es muy sencilla. Hasta los árboles la están viviendo; debe de ser sencilla. No puede ser muy complicada; incluso las aves, las rocas y los ríos la están viviendo.¿Por qué se ha vuelto tan complicada para el hombre? Porque el hombre puede teorizar sobre ella. 

Para estar en el centro de la vida, en su intensidad y pasión, deberéis desprenderos de toda filosofía sobre la vida. De lo contrario, permaneceréis oscurecidos en vuestras palabras.
¿Conocéis la famosa anécdota sobre un ciempiés que caminaba, Era una mañana soleada y hermosa, y el ciempiés se sentía feliz y debía estar cantando desde lo más hondo de su corazón. Marchaba, casi ebrio, con el aire de la mañana.
Una rana sentada a un costado se hallaba muy desconcertada... debía ser filósofa. Exclamó: «¡Hermano! ¡Aguarda! Realizas un milagro. ¡Cien pies! ¿Cómo lo consigues? ¿Qué pie va primero, cuál segundo, tercero... y así hasta llegar a los cien? ¿No te desconciertas? ¿Cómo lo logras? A me parece imposible».
El ciempiés respondió: «Nunca lo había pensado. Deja que lo analice». Y allí de pie, comenzó a temblar y cayó al suelo. Él mismo se desconcertó... ¡cien pies! ¿Cómo se puede conseguir?
La filosofía paraliza a las personas. Quedáis paralizados por vuestras filosofías. La vida no requiere ninguna filosofía, la vida es suficiente en misma. No necesita ninguna muleta, ni apoyo, ni sostén. Es suficiente en misma.

Osho

Febrero 3

Febrero 3
A medida que sigues mis leyes y las obedeces, tu vida se enriquece y queda enormemente  bendecida.
Si desobedeces esas leyes, tarde o temprano te encontrarás rodando hacia abajo por la pendiente, hasta que te des cuenta en qué te habías equivocado y estés dispuesta a rectificar esos errores. Entonces es cuando has de empezar a dar prioridad a lo realmente importante y abandonar tu rebeldía y buscarme a y a Mi reino. No es fácil de hacer cuando has tocado fondo y crees que la vida carece de propósito. Sin embargo, eso es lo que tendrás que hacer. Poner tus pies en el peldaño más bajo de la escalera y comenzar a subir, por muy difícil que pueda resultar entonces. Si te esfuerzas hasta el siguiente peldaño y vas saliendo gradualmente de la desesperación en la que te habías hundido, la vida empezará a cambiar y encontrarás que tu vida tiene un propósito real.


Eileen Caddy

13 dic - Sta Filomena