218. Budeidad
Nada falta, todo es como debería ser Todo el mundo ya es perfecto.
La perfección no es algo
a alcanzar; ya está
presente.
En el momento en el que os aceptáis, se os revela.
Si no os aceptáis,
no dejáis de perseguir
sombras, espejismos lejanos. Y solo os parecen
hermosos cuando os encontráis
muy lejos de ellos. Cuanto más os acercáis,
más descubriréis que no hay nada, únicamente arena; que era un espejismo. Entonces creáis otro espejismo. Y así es como la gente desperdicia toda su
existencia.
Simplemente aceptaos como sois. No condenéis,
nada hay que condenar, nada hay que juzgar.
No hay, manera de juzgar, de comparar,
porque cada persona es única. Nunca ha habido
un hombre como vosotros
y nunca volverá
a haberlo, de modo que estáis
solos; la comparación no es posible. Y así es como la existencia quiere que seáis, por eso sois de esa manera. No luchéis con la existencia, y no intentéis mejoraros, de lo contrario
crearéis un desastre. Así es como las personas han estropeado sus vidas.
Este es mi mensaje:
aceptaos. Será duro, muy, duro, porque la mente idealista
siempre está ahí, vigilando y diciendo: «¿Qué estáis haciendo?
¡No es lo correcto! Tenéis que volveros
grandes, tenéis que convertiros en Buda o en Cristo...
¿qué hacéis? Esto no parece un Buda, os comportáis como necios. ;Estáis locos?».
Aceptaos. En esa aceptación
consiste la budeidad.
Osho - DÍA A DÍA,
365 meditaciones para el aquí y el ahora.