“Oración” escrita por una monja del siglo XVII


ORACIÓN
Señor, tú sabes mejor que yo, que estoy envejeciendo y un día seré vieja.
Libérame de las ansias de querer arreglar la vida de los demás.
Que sea pensativa, pero no taciturna, solícita, pero no mandona.
Con el vasto acopio de sabiduría que poseo, parece una lástima no usarla  toda, pero tú sabes, Señor, que quiero que me queden algunos amigos al  final.
Mantén mi mente libre de la recitación de infinitos detalles.
Dame las alas para ir derecho al grano.
Sella mis labios para que no hable de mis achaques  y dolores.
Ellos van en aumento con el pasar de los años, como también mi  gusto por recitarlos.
Pido la gracia de poder escuchar con paciencia el  relato de los males  ajenos.
Enséñame la gloriosa lección de que a veces es posible que esté  equivocada.
Mantén en mí una razonable dulzura.
No quiero ser santa.
Es difícil convivir con algunas de ellas; pero una vieja amargada es: una de las obras supremas del diablo.
Ayúdame a extraer de la vida toda la diversión posible.
Nos rodean tantas cosas divertidas, que no quiero perderme ninguna.
Amén.
de la página de Graciela Moreschi

Permaneced inexplicables


119. Permaneced inexplicables               
No todo en la vida necesita ser explicado. No tenemos la responsabilidad de explicarlo todo. Uno puede permanecer inexplicable.
Todo lo profundo siempre es inexplicable. Aquello que podéis explicar será muy superficial. Hay cosas que no podéis explicar.
Si os enamoráis de una persona, ¿cómo podéis explicar cómo os habéis enamorado? Sea lo que fuere lo que respondáis, parecerá estúpido: por su nariz, por su cara, por su voz... Todo eso no parecerá merecedor de ser mencionado, pero hay algo de eso en la persona. Esas cosas pueden estar, pero ese «algo» es mayor que todo lo demás. Ese algo es más que el total.

Osho

Abril 29


Ábrete al aliento de Mi amor y luz divinas. Abre las puertas de tu corazón y no permitas que nada detenga esa afluencia. Mantén las puertas abiertas de par en par para que el amor y la luz puedan circular libremente en ti y través de ti, para que la fuerza vital sea siempre evidente en tu interior. Cuando las puertas de tu corazón están cerradas y cesa el flujo de la luz y del amor, toda tu vida se estanca, y nada puede sobrevivir en un estanque de agua que no corre. Por eso has de mantener conscientemente abiertas esas puertas y sacar agua de Mí, la fuente de toda vida, en todo momento, para que tu corazón nunca se seque ni se estanque. Un riachuelo que deja de extraer su suministro de agua de la fuente, acaba por secarse. Si tú dejaras de sacar tu suministro de Mí, pronto te secarías y acabarías siendo inútil. Por eso, date cuenta conscientemente de Mí y extrae constantemente tu fuerza vital de Mí. Haces tú elección día a día, hora tras hora, cada minuto.

Eileen Caddy

13 dic - Sta Filomena