Pies 20.08


232.  Pies            
Sentid más y más en los pies.
A veces simplemente erguíos sobre la tierra y sentid su frescura, su suavidad, su calor. Sentid aquello que la tierra esté preparada para danos en ese momento y dejad que fluya a través de vosotros. Y permitid que vuestra energía fluya hacia la tierra. Estad conectados con ella.
Como mucho, la gente respira hasta el ombligo, pero no más allá, de manera que la mitad del cuerpo está casi paralizado, y, debido a ello, lo mismo le sucede a la mitad de la vida. Entonces muchas cosas se vuelven imposibles, porque el tronco inferior del cuerpo es como una raíz. Las piernas son las raíces que os conectan con la tierra. De modo que las personas cuelgan como fantasmas, desconectadas de la tierra. Uno ha de regresar a los pies.
Lao Tse solía decirle a sus discípulos: «A menos que empecéis a respirar desde la planta de los pies, no sois mis discípulos». Respirar desde la planta de los pies... y tiene toda la razón. Cuanto más ahondéis, más profunda será vuestra respiración. Es casi cierto que el límite de vuestro ser es el límite de vuestra respiración. Cuando el límite se incrementa y llega hasta vuestros pies, a la respiración le sucede lo mismo -no en un sentido fisiológico, sino psicológico-, y entonces habréis reclamado la totalidad de vuestro cuerpo. Por primera vez estáis enteros, de una pieza, juntos.
Osho  - DÍA A DÍA,  365 meditaciones para el aquí y el ahora. 

Agosto 20


Todas las almas han de aprender la autodisciplina, y cuanto antes se aprenda en la vida, más fácil resulta. Al principio, la autodisciplina puede suponer un auténtico esfuerzo, porque has de obligarte a hacer cosas contra las que el pequeño yo se rebela. Has de aprender a decirte "no" a ti misma, pero cuanto más firme seas contigo misma, más rápidamente reinará la paz dentro de ti. Es bueno que cada tanto te detengas a examinar en qué áreas te muestras débil y autoindulgente. Eso implica que has de ser muy honesta y no buscarte excusas. A lo mejor incluso te ayuda escribir las zonas en las que te parece que necesitas cambiar para tenerlas ante ti. A continuación, haz algo al respecto. Si te sientes incapaz de superar ciertas flaquezas, no te pido que lo hagas por ti misma. YO ESTOY siempre aquí para ayudarte. ¿Por qué no llamarme?
La Voz Interior  Eileen Caddy

13 dic - Sta Filomena