160 Simpatías y antipatías
El día que una persona decide no pedir las
cosas que le gustan y empiezan a gustarle las cosas que suceden, es el día en
que se vuelve madura.
Podéis seguir anhelando las
cosas que os gustan. Eso siempre os hará desdichados, porque, en primer lugar,
nunca van a suceder. El mundo no funciona de acuerdo con vuestras simpatías y
antipatías. Carece de garantías de que lo que queréis es lo que también quiere
el todo. Existe una gran posibilidad de que el todo esté destinado hacia otra cosa
de la que nada sabéis.
Cuando a veces acontece eso
que os gusta, entonces tampoco os sentiréis muy felices, porque sea lo que
fuere lo que exigimos, ya lo hemos vivido a través de la fantasía. De modo que
ya es de segunda mano. Si decís que os gustaría que un determinado hombre fuera
vuestro amante, entonces en muchos sueños y fantasías ya habéis amado a ese
hombre. Y si ello acontece, entonces el hombre verdadero no estará a la altura
de vuestras fantasías y va a ser simplemente una copia, porque la realidad
nunca es tan fantástica como la fantasía. Y os sentiréis frustrados.
Pero si os empieza a gustar
aquello que acontece -si no ponéis vuestra voluntad en contra del todo, si
simplemente decís muy bien, si pase lo que pase decís que sí-, entonces jamás podréis
ser desdichados. Porque sin importar lo que pase, siempre exhibís una actitud
positiva, lista para recibir y disfrutar.
DÍA A DÍA, 365 meditaciones para el aquí y el ahora. Osho