Febrero 26
Hay momentos en que lo nuevo
se revela de manera tan gradual que no notas los cambios que están teniendo
lugar hasta que de repente te das cuenta de que todo ha sucedido sin ser
consciente de ello. En otros momentos puedes ver producirse los cambios ante tus
ojos a medida que se despliegan paso a paso. Y también hay momentos en que las
cosas ocurren por la noche, o como en el invierno; entonces, cuando uno se va a
la cama de noche, por fuera todo está normal, y al despertarse por la mañana
todo se ha quedado cubierto de nieve. No ha hecho falta que hicieras nada al
respecto; ha sucedido de la manera más milagrosa. Hay muchas formas distintas
en las que habrá de revelarse lo nuevo. Todo lo que has de hacer es andar a su
compás y no resistirte. No es necesario que el cambio sea doloroso. Es
inevitable porque nada puede permanecer igual; y si miras en el interior de tu
corazón, no querrías que así fuera.
Eileen Caddy