Usar medicinalmente 14.08


226.   Usar    medicinalmente       
Siempre que haya algo de presión del exterior, la entrada directa a la meditación se torna difícil. De modo que antes de meditar; durante un periodo de quince minutos, tenéis que hacer algo para cancelar la presión.
Durante quince minutos, sentaos en silencio, pensad que todo el mundo es un sueño... ¡y lo es! Pensad que es un sueño y que no hay nada de importancia en él. Eso es lo primero.
Lo segundo. Tarde o temprano todo desaparecerá..., también vosotros. No siempre estuvisteis ahí, no siempre lo estaréis. De manera que nada es permanente. Y tercero: solo sois testigos. Esto es un sueño pasajero, una película. Recordad estas tres cosas: que este mundo es un sueño y que todo va a pasar, incluso vosotros. La muerte se acerca y la única realidad que hay es la del testigo, de modo que solo sois testigos. Relajad el cuerpo, luego sed testigos durante quince minutos y después meditad. Podréis entrar en la meditación y ya no habrá problema.
Pero siempre que sintáis que esa meditación se ha vuelto sencilla, parad; de lo contrario se volverá habitual. Ha de ser utilizada solo en condiciones específicas, cuando es difícil entrar en la meditación. Si la hacéis todos los días, está bien, pero perderá su efecto, y entonces dejará de funcionar. Así que usadla medicinalmente. Cuando las cosas vayan mal y se compliquen, hacedlo, y os despejará el camino y seréis capaces de relajaros.
Osho  - DÍA A DÍA,  365 meditaciones para el aquí y el ahora. 

Agosto 14


Al igual que tu contribución al conjunto es la de tus dones y talentos específicos, así también cada pieza del rompecabezas de la vida  se  une  para  formar  el  todo  perfecto.
¿Cuáles son tus dones y talentos específicos?
¿Por qué no compartirlos y dejar de esconderlos, ya que todos ellos se necesitan? Quizá te de la impresión de que tienes muchos dones, o puedes creer que tienes muy poco o nada que dar. Lo último no es cierto. Tú tienes algo propio y único que dar, algo que nadie podría dar en tu lugar, y ese algo es necesario. De ti depende averiguar de qué se trata y darlo. Se requiere toda clase de personas para hacer el conjunto. Cada una de las tuercas, ruedecillas y muelles son necesarios para construir un reloj. Cada órgano del cuerpo, cada célula y átomo diminutos son precisos para formar el cuerpo perfecto. Cuando puedas verte como parte del todo, ya no querrás guardar para ti lo que tú tienes que dar.
La Voz Interior  Eileen Caddy

13 dic - Sta Filomena