2 - Aficionados y Expertos
Todos los grandes descubrimientos los hacen los aficionados.
Siempre sucede... cuando
empezáis un trabajo nuevo, sois muy creativos, os involucráis profundamente,
proyectáis todo vuestro ser. Entonces, poco a poco, os vais familiarizando con
el territorio. Y en vez de ser originales y creativos, comenzáis a ser
repetitivos. Eso también es natural, porque cuanta más habilidad adquirís en
cualquier trabajo, más repetitivos os volvéis. La destreza es repetitiva.
De manera que los grandes
descubrimientos los hacen los aficionados, nunca la gente experta... porque una
persona experta pone mucho en juego. Si sucede algo nuevo, entonces, ¿qué será
de su vieja habilidad? Durante años ha aprendido y se ha convertido en un
experto. Por ello los expertos jamás descubren nada; nunca van más allá de los
límites de su conocimiento. Por un lado se vuelven más y más diestros, y por el
otro, más y más aburridos, hasta que el trabajo parece una carga. Porque ya no
hay nada nuevo que pueda entusiasmarlos... ya saben lo que va a pasar, saben lo
que van a hacer; no hay sorpresa en ello.
Así pues, aprended una
lección: es bueno alcanzar una habilidad, pero no es bueno acostumbrarse a ella
para siempre. Cuando os surja la sensación de que las cosas se han estancado,
cambiadlas, inventad cualquier cosa, añadid algo nuevo, borrad algo viejo.
Volved a ser libres del patrón en el que habéis caído, lo que significa ser
libres de vuestra habilidad; volved a ser aficionados. Eso requiere coraje y
agallas, pero así es como se torna hermosa la vida.
Osho
No hay comentarios.:
Publicar un comentario