No te sientas sobrecargada por
todo lo que queda por hacer. Tan sólo aprende a dar un paso cada vez, y
reconoce que cada paso es un paso más que te acerca a la meta. No intentes
correr antes de aprender a andar, o asumir algo que es demasiado pesado para
ti, de modo que tengas que arrastrar los pies, haciendo un enorme esfuerzo en
cada paso. Hacer esto no es la actitud correcta; no es llenarse de Mi gozo y
libertad. Eso significa que estás intentando hacerlo con tus solas fuerzas;
significa que te has separado de Mí y has perdido la visión. Deja de hacer lo
que estás haciendo, y cambia toda tu actitud. Entrégamelo todo, relájate y disfruta
con lo que estás haciendo de una forma completamente nueva. El cambio de
actitud puede venir en un abrir y cerrar de ojos, así que cambia, cambia
rápidamente, y danza y canta a lo largo del día conmigo de la mano.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario